Hiperextensión de rodilla

Hiperextensión de rodilla

Causas de la hiperextensión de rodilla

La hiperextensión de rodilla es una lesión deportiva común en la que la rodilla se dobla hacia atrás más allá de su posición normal. La gravedad de la lesión puede variar desde una respuesta inflamatoria leve hasta una lesión grave. La hiperextensión de rodilla es muy común de forma natural. Pero en el caso de una lesión por hiperextensión, la articulación se hiperextiende con fuerza durante la carga de peso y llega al final del movimiento disponible.
* Un aterrizaje incómodo que obliga a la rodilla a retroceder sobre sí misma al aterrizar de un salto. Por ejemplo: un jugador de baloncesto, netball o fútbol que salta y aterriza con la rodilla recta, que se hiperextiende bajo la carga del aterrizaje.
* Un esquiador que choca con un obstáculo, como un banco de nieve u otro obstáculo, a gran velocidad y sigue avanzando mientras los esquís se detienen repentinamente. Esto suele ocurrir cuando la fijación del talón no se libera y la rodilla se hiperextiende. Una buena razón para asegurarse de que las fijaciones están bien ajustadas antes de salir a esquiar.
Cuando una rodilla hiperextendida se produce por primera vez, a menudo se oye un “chasquido” o “crujido” cuando la rodilla es forzada hacia atrás. El chasquido puede ser simplemente una liberación de gas (cavitación) de forma similar a una manipulación articular, pero también puede significar una posible lesión de ligamentos. A veces se oye un crujido cuando las superficies óseas de la rodilla chocan entre sí a gran velocidad.

Prueba de hiperextensión de rodilla

Como la hiperextensión de la rodilla puede producirse con distintos niveles de gravedad, los síntomas de la lesión dependerán del cuerpo de cada deportista, del método de hiperextensión y de la fuerza general de la articulación de la rodilla. Los síntomas más comunes de la hiperextensión de rodilla son:
En el caso de que una hiperextensión de rodilla haya causado un daño grave a las estructuras y ligamentos, la presencia de un dolor agudo y severo será casi inmediata. Tanto si la lesión que ha provocado la hiperextensión ha sido traumática como si es menor, las personas que experimentan estos síntomas pueden beneficiarse de la búsqueda de atención médica.

Tratamiento de la hiperextensión de la rodilla

La hiperextensión de rodilla es una lesión común entre los atletas de una gran variedad de deportes. La gravedad de la afección varía en función de la causa de la lesión y del organismo de cada atleta. En la mayoría de los casos, la hiperextensión de la rodilla presentará síntomas evidentes, como hinchazón, reducción de la amplitud de movimiento, dolor agudo localizado e inestabilidad en la pierna afectada.
La hiperextensión se produce cuando la articulación de la rodilla se ve forzada a extenderse más allá de su rango de movimiento normal. En estos casos, se ejerce una gran tensión sobre uno o más de los cuatro ligamentos principales de la articulación de la rodilla:
Las hiperextensiones de la rodilla pueden ocurrirle a cualquiera, pero con frecuencia son el resultado de lesiones deportivas. Los atletas que compiten en deportes de contacto como el fútbol americano, el fútbol o el lacrosse son los más afectados. Otros deportes, como el esquí, pueden hacer que la articulación de la rodilla se desplace repentinamente de su posición y provocar esta lesión.
Cuando un peso o una presión excesivos obligan a la rodilla a extenderse, la articulación puede extenderse más allá de su verdadera amplitud de movimiento, provocando daños en los tejidos blandos, inflamación y posibles desgarros o distensiones del LCM, el LCL, el LCA o el LCP. Las causas más comunes de la hiperextensión de la rodilla son:

Ejercicios de hiperextensión de rodilla

El genu recurvatum es una deformidad en la articulación de la rodilla, de manera que ésta se dobla hacia atrás. En esta deformación, se produce una extensión excesiva en la articulación tibiofemoral. El genu recurvatum también se denomina hiperextensión de la rodilla y rodilla hacia atrás. Esta deformidad es más frecuente en las mujeres[cita requerida] y en personas con laxitud ligamentosa familiar[2] La hiperextensión de la rodilla puede ser leve, moderada o grave.
El rango normal de movimiento (ROM) de la articulación de la rodilla es de 0 a 135 grados en un adulto. La extensión completa de la rodilla no debe superar los 10 grados. En el genu recurvatum, la extensión normal aumenta. El desarrollo del genu recurvatum puede provocar dolor y artrosis de rodilla.